Mediateca de Mont de Marsan

Mediateca de Mont de Marsan

De noche se transforma en una linterna que da vida a la plaza, convirtiéndola en un espacio acogedor, abierto y transparente.
Obra
Mediateca de Mont de Marsan
Arquitectura
archi5
Cliente
Communauté d’agglomération du Marsan
Ubicación
Mont de Marsan, Francia
Ingeniería acústica
Tisseyre & Associés
Año
2012
Sup. construida
4.750m ²
Fotografía
Communauté d’agglomération du Marsan, Sergio Grazia.
Web
www.archi5.fr

Este edificio se instala en el centro de un patio de maniobras militares rodeado de sus austeros edificios (los cuarteles de Bosquet aluden al Mariscal Pierre Bosquet) abriendo un espacio cultural en la ciudad, una plaza cultural. La planta perfectamente cuadrada está ligeramente revirada respecto de los bordes del solar, logrando una tensión que pone en valor el espacio urbano en que se inserta. El volumen se eleva y los planos inclinados de borde exterior sitúan al edificio en una altura noble que, sin embargo, se somete a la altura de los edificios circundantes. Las fachadas acristaladas exentas y dilatadas del edificio interior son simétricas, geométricas y regulares: reflejan parcial y delicadamente los edificios del entorno y regalan transparencias al edificio de la Mediateca que acentúan la noción de plaza cubierta que se refuerza por la continuidad de los pavimentos. En ella se habilita un gran espacio abierto organizado en torno a un patio interior de formas ondulantes (hay menciones a Matisse y a A. Aalto) que lo animan y lo nutren de luz natural. Un espacio líquido, fluido, continuo. Un espacio resguardado, predominantemente blanco y prístino. Son los usuarios, los objetos y algunos muebles los que proveen el color y que, por contraste, revelan el magnífico espacio construido. La estructura es simétrica y simple como la planta. Sobre un piso subterráneo de hormigón armado, se traza una grilla ordenada de ejes en los que se sitúan una doble crujía de columnas de acero que reciben las cargas de las losas del piso superior y la cubierta. La singularidad se produce en el patio central en que las columnas de acero siguen la sinuosidad del perímetro. El muro cortina queda al exterior alternando cristales DVH (doble vidriado hermético) transparentes, traslúcidos y reflectivos. La estructura de aluminio queda por el interior de los cristales y se conecta a la estructura principal del edificio mediante tensores y soportes de acero inoxidable. Hay muchas aplicaciones de acero en estructuras secundarias, revestimientos y acabados que se pueden visualizar muy bien en los detalles que adjuntamos.

F. Pfenniger

La Mediateca es un fuerte símbolo para el área urbana de Marsan. Es un espacio de descubrimientos, encuentros e intercambios para sus usuarios. Es un edificio visible y diferenciable, sin ser abrumador. La Mediateca se yergue en medio de los cuarteles de Bosquet y se ha cuidado aumentar el diálogo con la fuerte totalidad arquitectónica del lugar. Con su envolvente limpia de líneas geométricas puras, un cuadrado de 60m x 60m, el edificio cumple con el lay out clásico pero contrasta con su austeridad por la vía de compensar el sistema abriendo una esquina en la ciudad. Su fachada refleja las barracas circundantes como un espejo respetuoso y deferente. El edificio ha sido diseñado como una plaza cultural cubierta por la vía de hacer sus fachadas transparentes y el pavimento uniforme, tanto como por su posición en el centro de las barracas.

El diseño se lee extendiendo la cubierta verde para hacerlo parecer flotando sobre el piso. Los planos inclinados de césped que rodean el edificio elevan la mirada hacia las fachadas vidriadas que alternan cristales transparentes y reflectivos. El emplazamiento de la Mediateca centrado en el patio de maniobras militares inspira un edificio de cuatro lados principales, variando de uno en otro simplemente adaptando la dirección que enfrentan.

La Mediateca confirma su identidad desde cualquier punto de vista que es observada. De noche se transforma en una linterna que da vida a la plaza, convirtiéndola en un espacio acogedor, abierto y transparente.

El espacio interior en el primer piso es completamente abierto y se centra en torno a un patio cuyo diseño está inspirado en los diseño de las hojas de acanto de Matisse mientras los volúmenes apelan a los jarrones de Alvar Aalto. Las distintas funciones están organizadas naturalmente en torno a la planta libre lo que conserva la continuidad visual y difumina suavemente la luz natural.

La Mediateca de Mont de Marsan es el primer patio utilizado como una sala de lectura abierta. Es un lugar que provee una atmósfera relajada y contemplativa a sus usuarios.

La intimidad de los usuarios es creada por elementos arquitectónicos fuertes que inspiran interacción visual. Perfectamente puede ser esta “sorpresa” casi oculta, el patio, que hace al edificio tan popular entre el público.

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