Chatham University Eden Hall Campus

Chatham University Eden Hall Campus

Una muestra más del rol fundamental que están cumpliendo las universidades y otras entidades educativas y culturales para innovar, implementar y promover la sustentabilidad en Estados Unidos

El Campus Eden Hall de la Universidad Chatham ha sido diseñado y construido como un laboratorio viviente, en un ambiente enfocado a la naturaleza y el aprendizaje. Es el resultado de una audaz meta de la Universidad de Chatham para crear el primer campus de energía neta-positiva del mundo, es decir producir más energía de la que se consume. Junto con ello, el Campus Eden Hall, y en especial su Escuela de Sustentabilidad, busca reutilizar el agua, generar cero desechos, producir alimentos, reciclar nutrientes, mejorar los suelos y apoyar el hábitat natural, a la vez que educa a la siguiente generación de gestores ambientales del estado de Pittsburgh. Para ello, los edificios, paisajes e infraestructuras del campus crean un entorno de investigación activo y experimental. Las nuevas formas de construcción, los espacios de reunión al aire libre y las ilustraciones integradas complementan e interpretan los sistemas naturales, al tiempo que hacen que las estrategias de sustentabilidad sean transparentes y explícitas.

Imagen 1: Vista exterior del Centro Barazzone del Eden Hall Campus, destacando su diseño simple en base a estructuras de acero e integrado al paisaje. Al fondo, se observa un gran techo solar a través del cual se accede al campus.
Imagen 2: Vista interior del Centro Barazzone, destacando  su atrio central. Créditos: Bruce Damonte

Decisión e Integración
Pese a ser una universidad pequeña, el enfoque y decisión de Chatham University en torno a la investigación práctica en temas de sustentabilidad ha sido un motor fundamental para obtener financiamiento público y privado. El financiamiento externo requiere a su vez de demostrar que las estrategias de sustentabilidad implementadas son costo-efectivas. Así, después de recibir una donación de 150 hectáreas al norte de Pittsburgh, se definió una primera fase de desarrollo de 31.5 hectáreas, incluyendo residencias para albergar a 250 de los 1.200 estudiantes del campus, más laboratorios, cafetería, comedores comunes con aulas integradas, espacios de reunión al aire libre e infraestructura de apoyo. Los edificios, el paisajismo y las infraestructuras se desarrollaron como un entorno activo de investigación, incluyendo sistemas de energía renovable, agricultura, acuicultura, tratamiento de agua y recuperación de nutrientes, protección de cuencas, suelos, vida silvestre y hábitat. Dado su rol educacional, dichas estrategias se están constantemente demostrando, probando y midiendo. El campus provee también una oportunidad importante para demostrar prácticas sustentables de uso de la tierra en el ambiente periurbano, ya que este área es la parte de mayor crecimiento de Pittsburgh y de muchas ciudades en el mundo.

Figura 2: El campus se ubica al norte de la ciudad de Pittsburgh, en el estado de Pennsylvania, EEUU. En un total de 150 hectáreas, se espera que sea un laboratorio viviente, en un ambiente enfocado a la naturaleza y el aprendizaje. Créditos: Mithun.

Comunidad y Ecología
El  campus es abierto al público y fue diseñado para promover la interacción y el compromiso con una comunidad intelectual más amplia a través de instalaciones que, gracias al uso de estructuras de acero y paneles no estructurales, permiten un uso flexibley adaptable para acomodar diversas reuniones, eventos y retiros. El  campus es abierto al público y fue diseñado para promover la interacción y el compromiso con una comunidad intelectual más amplia a través de instalaciones flexibles adaptables para acomodar diversas reuniones, eventos y retiros. En él se desarrollan diversas actividades, tales como música en el anfiteatro, visitas al café Dairy Barn, talleres de sustentabilidad para niños de pre-básica y básica, mercados de agricultores y el apoyo a la comida local. La universidad entiende el reforzamiento de su relación con la comunidad como una tarea esencial, ya que en el largo plazo el campus está destinado a ser principalmente de destino residencial, con bajo uso del automóvil. De hecho, actualmente un 42% de quienes van o viven en el campus utilizan el transporte público, caminan y llegan en bicicleta.

Desde un inicio se realizó un proceso de diseño colaborativo para desarrollar la visión y los objetivos de este campus. Se llevaron a cabo talleres de diseño, en los que participaron los consultores de arquitectura y planificación y un comité de diseño que incluía profesores, personal, miembros de la junta directiva y representantes estudiantiles. Luego, se incluyó en el proceso a los funcionarios del municipio local y a los vecinos.

Los edificios están situados de modo que la circulación general se produce siguiendo la topografía del lugar, orientando las vistas hacia la cuenca del valle. Los jardines pluviales se entremezclan con lugares de reunión, conduciendo a un anfiteatro que a la vez funciona como depositario de las aguas lluvias provenientes de los jardines. Esta dinámica entremezclada o de mosaico de espacios se repite en el jardín educativo donde se destacan diversos paisajes funcionales, incluyendo humedales construidos para el tratamiento de aguas residuales, la recolección de aguas lluvias de los techos de los edificios, las plantaciones nativas y las hierbas para la cocina.


Figuras 3 a 10. El campus integra edificios e infraestructuras de alto desempeño en un ambiente y paisajismo sustentable, demostrado un uso de suelo integral en vez de una aproximación conservacionista sobre el paisajismo. Destaca el uso del acero  para distintos tipos de estructuras interiores y exteriores, tales como la cafetería, el invernadero y el techo solar del acceso principal. Créditos: Chatham University y Bruce Damonte

El diseño paisajístico también se centra en el manejo de especies de plantas y animales invasoras, la provisión de zonas de amortiguación a lo largo de arroyos, y la generación de corredores para hábitats de vida silvestre. Así, un 40 por ciento del terreno del campus opera como espacios de servidumbre de conservación permanente, especialmente a lo largo del perímetro del campus, mientras que un 30 por ciento adicional posee un paisajismo apropiado para la flora y fauna local. Las alianzas con ONGs enfocadas en la ecología del paisaje dieron como resultado la plantación de árboles frutales de especies patrimoniales, la creación de estaciones de conteo de aves, y una futura área de juego natural para grupos de escolares visitantes y para los vecinos.

Si por una parte el Campus Eden Hall se encuentra en el tope de las cuencas hidrográficas de los ríos Ohio y Mississippi, las plantaciones de pino, la agricultura y las plantas invasoras han contribuido a la erosión del suelo y la sedimentación de los arroyos, además de los desbordamientos del alcantarillado municipal que afectan la calidad del agua. Por lo anterior, este proyecto adopta un enfoque integrado de recursos hídricos, manejo de nutrientes y mitigación de superficies impermeables. Un sistema de tratamiento de aguas residuales en base a humedales proporciona un tratamiento de alto estándar in-situ. El agua de lluvia se recoge de las cubiertas de los edificios y se utiliza para el riego, mientras que los 24 jardines pluviales manejan el agua superficial cuando hay tormentas, proporcionando a su vez un hábitat para las aves y las especies polinizadoras. El uso del agua potable se reduce mediante la reutilización de los efluentes de todos los edificios, excepto los dormitorios de las residencias de estudiantes, los que están conectados por ahora al alcantarillado municipal. El laboratorio del campus ofrece diversas oportunidades de investigación, con la capacidad de estudiar la calidad de cinco tipos de agua: agua potable, agua de lluvia, aguas grises, agua tratada de efluentes y agua de efluentes de acuicultura, proveniente esta ultima de un área para la perca amarilla y otras especies del agua fría.


Figura 11. El agua es manejada como un recurso valioso en el campus, con un importante foco en el ahorro de agua potable, la captación y reutilización de aguas lluvias y el tratamiento biológico in-situ para la posterior reutilización. Créditos: Mithun

Bienestar
El campus fue diseñado para promover hábitos saludables a través de la experiencia física de vivir en un ambiente con una profunda conexión con el mundo natural, con alimentos frescos cultivados localmente, y en un entorno que promueve el caminar y el uso de la bicicleta. De hecho, estudios posteriores a la ocupación muestran que el campus influye positivamente en el comportamiento y las actitudes sobre la salud y el medio ambiente. Los edificios también han sido diseñados para promover la salud y el bienestar. Un ejemplo es la residencia de estudiantes. El edificio es energía neta-cero, tiene ventanas operables en todas las habitaciones y protecciones solares de acero, excelente luz natural y vistas, controles individuales de climatización por habitación y un 100 por ciento de aire fresco, sin aire de recirculación entre las habitaciones. El bienestar también se genera gracias a los espacios de reunión informal en cada piso, un gimnasio en el nivel superior, y escaleras iluminadas naturalmente, que invitan a ser utilizadas. Por otra parte, el súper aislamiento térmico y los voladizos profundos de las ventanas orientadas al sur aumentan la eficiencia del edificio, junto con un innovador sistema de calefacción y refrigeración radiante incorporado en los cielos de los espacios interiores.


Figuras 12 a 15. Con un fuerte foco en el bienestar de los estudiantes, profesores y visitantes, el campus fue diseñado para fomentar formas activas de transporte. La colaboración temprana con los proveedores y sostenedores de los comedores, permitió la elaboración de un programa de alimentación saludable y el uso de alimentos producidos in-situ. Créditos: Bruce Damonte

Energía y recursos materiales
El campus de Eden Hall está pensado como una instalación de energía neta-positiva conectada a la red, con edificios diseñados para cumplir objetivos energéticos altamente eficientes. Las estrategias de energías renovables incluyen paneles fotovoltaicos en los techos y toldos, paneles solares para el agua caliente y un sistema geotérmico. En forma complementaria, una pequeña planta de cogeneración de 10kW ubicada junto a los comedores comunes produce electricidad y agua caliente con gas natural. Un circuito de energía enlaza distintos edificios, mejorando con ella la eficiencia global del sistema al distribuir el exceso de calor del intercambiador geotérmico hacia distintos recintos. Generalmente los edificios que incorporan preparación de alimentos tienen una mayor intensidad energética. En el caso de este campus, se realizaron modelos detallados de energía y un esfuerzo de colaboración con los operadores de las cocinas para adaptar el menú y el servicio de alimentos. Se incluyó un innovador diseño utilizando cocina de inducción eléctrica, refrigeración de alta eficiencia y una bodega con un enfoque en alimentos frescos.

Sumando todo lo anterior, se redujo en un 70 por ciento el consumo esperado de energía de los edificios y áreas comunes del campus, comparado a campus y edificios de similares características.
Respecto al uso de materiales, se utilizó una paleta consistente de materiales locales,entre ellos el acero, que se alineaban con los objetivos de sustentabilidad, incluyendo durabilidad, bajo mantenimiento y bajo impacto ambiental durante el ciclo de vida.  El equipo colaboró directamente con el Pittsburgh Green Building Alliance para reunir a los fabricantes en el proceso de diseño a través de foros abiertos y reuniones de seguimiento. El contratista principal del proyecto, un profesional local con experiencia en construcción sustentable, también fue una fuente importante de recomendaciones sobre productos y proveedores. Entre muchos de los materiales destacan productos innovadores manufacturados en el área de Pittsburgh. Por ejemplo, el equipo de diseño trabajó con la empresa PPG para seleccionar nuevos productos de doble acristalamiento rentables que superaran las opciones de triple acristalamiento, y se utilizaron revestimientos exteriores de baja energía contenida desarrollados por una empresa local.

 
Figuras 16 a 21. Las imágenes superiores muestran el edificio de la residencia de los estudiantes posee un alto rendimiento energético y de calidad ambiental interior, gracias a su súper aislamiento térmico, control y aprovechamiento solar a través de ventanas, iluminación eficiente y controlable, así como espacios comunes de gran calidad. Las imágenes inferiores muestran el antiguo establo lechero de 300 metros cuadrados, reutilizado como cafetería, con la estructura interior preservada y una nueva capa externa de alto rendimiento añadida para cumplir con los objetivos de alta eficiencia energética. Los pozos geotérmicos, la ventilación con recuperación de energía y las puertas y ventanas operables combinadas proporcionan un ambiente saludable, eficiente y confortable. Créditos: Mithun y Bruce Damonte

Información adicional
•    Destino:  Educación universitaria
•    Cliente:  Chatham University
•    Arquitectos:  Mithun
•    Ingenierías: CEC, KPFF Engineers, Interface Engineering
•    Construcción:  Sota Construction
•    Año de construcción: 2015
•    Superficie: 4.200 m2
•    Costo:  50 millones dólares (excluido mobiliario)
•    Ubicación:  Richland Township, Pittsburgh, Pennsylvania 

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